¿Se puede derribar a un avión secuestrado sobre un territorio
despoblado y, de este modo, matar a los pasajeros así como a los miembros de la
tripulación que se encuentran a bordo y no tienen nada que ver con ello, si se
sabe que el secuestrador quiere derribar el avión en un lugar (por ejemplo, en
un gran aeropuerto) en el que morirían muchas más personas?
Este dilema me llama muchísimo la atención, ya que es una de especie de lo que coloquialmente se conoce como "de perdidos al río". ¿Mato a unas cuántas personas para salvar a otras, o no intervengo y que pase lo que tenga que pasar?
Veámoslo desde el punto de vista del presidente del país, el
que decidirá si derribarlo o no. Como presidente, su misión es garantizar el
bienestar de la máxima población posible, por lo que si derribando el avión
mata a 50 personas, salva a 1500, ya que en el aeropuerto hay muchísima más
gente. Le guste o no, es su misión, y la población lo eligió para que cuando se
presentase un problema como este supiese afrontarlo.
Y ahora, veamoslo desde el punto de vista de los pasajeros
del avión: están desconcertados, aterrorizados y sin saber exactamente que
ocurre. Confian en que alguien los saque de ahí, en salir airosos de aquella
situación, aunque no les queda demasiada esperanza. Sus vidas están en manos de
un loco, aunque si el presidente hiciese algo, podría salvar a más personas a
costa de de ellos.
Y, ¿Qué hay de los pasajeros del aeropuerto? Esas personas
inocentes que no tiene culpa de nada, y que si no se actúa morirán. Las
familias de todos ellos, los conocidos, todas sus vidas dejarían de existir,
tan sólo serían restos de ceniza en mitad de lo que un día fue un aeropuerto.
Las razones por las que se debería derribar son que salvas
más vidas de las que quitas, por lo que se compensa, supongo. Además, las
personas del avión morirán igualmente. Es pura matemática, si restas las
personas del aeropuerto menos las del avión y te da un número positivo,
entonces debes hacerlo.
Pero, ¿quién es quién para decidir cuando poner
fin a la vida de las personas? ¿Acaso puedo decidir cuando quiero que alguien
deje de vivir, tomarme la justicia por mi cuenta y matarlo? El secuestrador del
avión ya no tiene nada que perder, porque si aterriza lo meterán en la cárcel
de por vida, y si no lo hace, morirá junto con el resto. Pero, ¿Y el
presidente? ¿Puede él decidir quién vive o quién no? ¿Quién es más importante?
Por lo visto sí, tiene el poder sobre todo el país, lo que el ordené, se deberá
de cumplir.
Las razones por las que no se debería derribar son que matas
a personas inocentes que no tienen nada que ver con ese atraco, que se han
visto envueltas en él sin buscárselo y nadie tiene por qué acabar con sus
vidas; pero, van a morir, indiferentemente de lo que haga el gobierno.
Te llevas por delante a un montón de personas inocentes que
nada tiene que ver con que a cualquiera se le vaya la cabeza y secuestre un
avión, pero están metidos hasta el cuello sin quererlo. También se llevan por
delante al piloto, una personas que está haciendo su trabajo honradamente, sin
hacer daño a nadie.
Supongamos que no se hace nada, y se deja que las cosas
pasen como tienen que pasar. La gente del aeropuerto muere, este se destruye
(aunque la vida humana vale más que esta gran infraestructura) y no queda nada.
Sería un atentado, que probablemente desencadenaría más atentados que
posiblemente acabarían en conlifctos realmente serios.
Entonces, ¿Qué debería hacer?
Si decidiese hacerlo, tendría una carga moral para el resto
de su vida, y parece que no, pero las cargas nos comen por dentro y nos quitan
la vida, nos van minando, nos hacen reflexionar sobre lo que hemos hecho y
acabamos volviéndonos locos porque no conseguimos sacarlo de nuestra cabeza.
Pensar sobre ellos no sirve. Lamentarte no va a hacer que esas personas
vuelvan.
Y es que, es una situación complicada, pero mi
conclusión, es que se debería derribar porque salvas más vidas de las que
quitas, y aunque quien decide quien vive o quien muere tenga una carga moral
para toda su vida, sigue mereciendo la pena. Las personas que van a bordo
del avión se pueden dar por muertas, y ya que vas a morir, al menos salvas a
alguien haciéndolo. Sé que es muy cruel matar a alguien que no tiene culpa de
nada, a quien no conoces y al que su muerte va a causar mucho daño entre sus
familiares y conocidos, pero no queda otro remedio. Además, derribarlo evitaría
el riesgo de conflictos bélicos posteriores, porque el país contra el que se
produciría el atentado no se quedaría quiero, y ahí empezaría todo. Bastantes
guerras hemos tenido ya.